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No corren buenos tiempos para la lírica. Casi todos los segmentos de mercado de nuestro sector están sufriendo. Y el de máquinas y equipos de climatización no es, por supuesto, ajeno a lo que sucede.
Las cifras disponibles de AFEC (Asociación de Fabricantes de Equipos de Climatización) hablan con claridad. El pasado año, la cifra total del negocio de venta de máquinas se situó en 543,41 millones de euros, lo que significó un descenso en torno al 27% sobre 2011.
Este año, el clima, la situación económica y la evolución del consumo serán los factores que marquen la pauta. Desgraciadamente, el calor llegó tarde, pero al menos parece que la economía (incluso las cifras del paro) ofrece algún dato alentador. "Si nos ayuda el clima, el mercado se recuperará", decía el mes pasado en estas mismas páginas Luis Mena, el presidente de AFEC. Por otro lado, algunas marcas hablan de una caída de mercado en el primer semestre del año, pero vaticinan una recuperación en el segundo.
Otra marca habla de guerra de precios y de un relevo de equipos antiguos de R22 que no acaba de llegar, aunque no todas las firmas son de la misma opinión. "El mercado está volcado en la reposición ya que el parque de instalaciones con refrigerante R22 es aún enorme y la sustitución por equipos R410A inverter a menudo no supone un gasto sino una inversión", dice uno de ellos.
Lo cierto es que, mientras pasa la tormenta, los fabricantes han decidido refugiarse en la innovación y en la mejora de su oferta de producto. El usuario pide más eficiencia energética, menor ruido y mayores prestaciones a los equipos. Más valor añadido, en definitiva.
Por otra parte, son muchos los fabricantes que esperan que la renovación del parque de equipos sea una solución que fomente la venta. La industria de la climatización no ha acusado tanto como otros sectores auxiliares la caída de la obra nueva, ya que la colocación, mantenimiento o sustitución de este tipo de equipos resulta fundamental en cualquier edificio.
Algunas normativas, como el reconocimiento de la bomba de calor como alternativa a la calefacción (Directiva 2009/28/CE), también han ayudado a dinamizar el sector.