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Los distribuidores desean que, por fin, 2014 signifique un punto de inflexión para el sector. El final de 2013 trajo algunas buenas noticias, que parecieron enfriarse en el inicio de este año, pero aunque sólo sea por el tiempo que llevamos en crisis, son muchas las voces que esperan que llegue algo de luz en los próximos meses. La mejora, si llega, debería hacerse más evidente en el segundo semestre.
El sector de la distribución comienza 2014 con una mirada muy similar a la que despidió 2013. No hay grandes noticias bajo el sol y al optimismo le cuesta hacerse un espacio tras tantos años de cataclismo. De momento, la mejora de las cifras en la macroeconomía no se traduce en el día a día de la calle ni de las empresas.
El mercado ha caído desde el estallido de la crisis por encima del 70%, pero no lo ha hecho tanto el número de almacenes. Las estimaciones apuntan a que entre un 20 y un 30% de almacenes han tenido que echar el cierre, aunque en algunas Comunidades Autónomas, como Andalucía o Extremadura, el porcentaje es mucho más elevado.
El sector se ha aferrado a la concentración, a la especialización o, justo lo contrario, el aumento del portfolio de producto para capear el temporal. También hay que tener en cuenta la entrada de distribuidores europeos en el negocio, como es el caso de Cordes & Graefe, que compró 24 almacenes propiedad de Thisa. En lo que sí parece haber cierta coincidencia es en que, por fin, en 2014 se llegará a tocar fondo, aunque también en este punto hay espacio para el debate.
La importancia de la macroeconomía
"El mercado no ha cambiado, la realidad es la misma. Quizá puede que lo haya hecho algo la perspectiva. Confió en que si la macroeconomía no va mal, podamos estar ante un año plano", afirma Sebastián Molinero, gerente de Andimac.
"Quizá, como mucho, estemos en un año más equilibrado, pero la obra nueva seguirá descendiendo. Toca esperar a la reforma que repuntará algo si no se sigue destruyendo más empleo. Ante una demanda casi inexistente, un porcentaje de la población, si no atisba más riesgos, puede comenzar a reformar su vivienda".
"En el negocio de la distribución muchas empresas siguen mal y el acceso al crédito continuará siendo difícil durante 2014. El mercado se ha complicado tanto que lo que existen son nichos de actividad que sólo garantizan la mera supervivencia", añade Molinero.
"Yo no soy tan pesimista como en 2013, este año será plano, pero no caeremos más", explica Jordi Llovera, el gerente del Grupo HDF.
"Creo que el escenario seguirá siendo de guerra de precios por la coyuntura que vivimos y porque no hay sitio para todos. En un mercado reducido, en el que han desaparecido instaladores, deben hacerlo también más distribuidores, incluso quizá Grupos", añade.
"El sector debe tirar por el lado de la reforma, porque no hay edificios nuevos, apenas se mueve nada, ni siquiera se hacen supermercados, salvo en el caso de Mercadona. De momento, lo único que se ha movido es la reformita pequeña, pero también depende mucho del consumo y está todo muy parado".
"En cualquier caso, soy ligeramente más optimista que en 2013. De hecho, el último trimestre de 2013 se notó una ligera reactivación".
En la evolución de la distribución, apunta dos tendencias que vendrán del "refuerzo de los Grupos de Compra, que cada vez tendrán más peso y darán más servicios, y concentración".
Para Marcos Hernánz, gerente de Cobber, siguen teniendo sentido "las perspectivas negativas de 2013". Y pone ejemplos para su análisis. "Seguimos limitados por la falta de vivienda nueva, aunque la buena noticia es que ya casi no afecta a nuestros negocios. Quizá otra noticia favorable sea el hecho de que, por fin, así parece en algunas Comunidades Autónomas, puede comenzar a apostarse en 2014 por mejorar la fiscalidad en la rehabilitación".
"El peso del sector de la construcción debe ser de doble dígito en el PIB para que mejore nuestra economía y de paso nuestro sector. También será importante que la mejora de la macroeconomía llegue a la micro, y eso se llama crédito".
Sobre la situación del sector de la distribución, Hernánz afirma que "la estructura empresarial en este sector todavía no es la adecuada". "Seguramente habrá más cierres, muchas empresas no tienen viabilidad en el medio plazo. El negocio ahora es el goteo, a través de instaladores pequeños y con un peso cada vez mayor del particular".
"En este momento muchos negocios están fuera de la dinámica del mercado. Y mientras el sector ha caído un 70%, los almacenes no lo han hecho en la misma proporción".
"El futuro pasa por una distribución menos atomizada, dominio de grandes empresas y pequeños negocios casi de autoempleo. Estamos en un momento de transformación en el sector que no durará un año, sino que se hará en un ciclo de al menos cinco años. Asistiremos a una desatomización paulatina y una profesionalización mayor a medio plazo. Habrá empresas que desaparecerán, otras se integrarán y otras serán tiendas pequeñas".
Félix Zamora, el gerente de Cealco, apuesta por un aumento de la colaboración en el sector de la distribución, que en su caso se traduce en un almacén logístico que permite entregas en 24/48 horas y un menor stock en el punto de venta de sus asociados.
Zamora no cree tanto en la especialización que se ha seguido en estos años de crisis, como en el aumento del portfolio de productos, algo que cada vez es más evidente en el caso del sector de material eléctrico.
En su opinión, el mercado "ha tocado fondo y ya no puede seguir en la reducción de estructura en las empresas". Y añade: "En construcción ya no habrá caída de doble dígito en 2014. Según Euroconstruct, el mercado cayó todavía un 20% en 2013 en obra nueva y reforma, pero lo hará un 6% en 2014 y ya en 2015 estará en cifras positivas".
En el caso de la distribución, este año debería venir marcado por la estabilidad, pero "aún será difícil ver datos positivos".
Para Zamora, la concentración será un "fenómeno claro, habrá una selección de distribuidores y el ecosistema se tendrá que adaptar al mercado".
Por último, el gerente de Cealco apunta al peso creciente en el sector de las marcas blancas, algo que "irá a más en los próximos años".
Cierre del grifo financiero a la construcción
Esther Estévez, la gerente de Amascal, confía en el Plan PIMA Sol para la rehabilitación energética en instalaciones hoteleras y en las líneas de rehabilitación energética del ICO como iniciativas que deben ayudar a dinamizar el mercado. "Bruselas apuesta por la eficiencia y la rehabilitación energética. Y creo que el distribuidor que ha apostado por la rehabilitación energética debería crecer, aunque existen problemas, que casi se han hecho estructurales que permanecen, como la morosidad y los impagados".
"Uno de los problemas que observo es que el sector financiero sigue sin creer en la construcción, tampoco entiendo que se apueste por dar múltiples ayudas al sector del automóvil a través del Plan PIVE y en el caso de la construcción no suceda eso".
Para Estévez, los almacenistas están apostando por la "diversificación de producto, con una apuesta cada vez mayor por el material eléctrico".
"El sector no está peor que hace doce meses, pero sigue bloqueado por la ausencia de crédito. El mercado en 2014 debería dejar de caer o subir de un modo escasísimo. A medio plazo sí creo que habrá un despegue que no será en ningún caso espectacular".
En un negocio que ha caído en un 70% desde el inicio de la crisis, Estévez cifra el cierre de almacenes en un porcentaje en torno al 30%. "Y el que ha llegado hasta aquí ya no va a cerrar", finaliza.
Miguel Ángel Abad, gerente de J. Abad Comercial del Cobre, no tiene dudas al afirmar que la caída del 60-70% del mercado es cierta. "Sólo funciona la reposición como mero recambio de aparato en el caso de la calefacción en productos como calderas, termos o calentadores, porque hablamos de un bien de primera necesidad. En el resto del mercado la caída ha sido espectacular. Hay que tener en cuenta que hemos pasado de construir 700.000 viviendas/año a 50.000".
Para Abad, "el distribuidor que ha hecho bien los deberes no ha caído tanto porque en este tiempo de crisis ha ampliado su zona de influencia y su gama de producto". "Mi sensación es que desde el verano aquí se ha notado un cierto repunte, pero también es importante analizar los porqués: desaparición de la competencia, cierre de negocios en el mes de agosto, menor stock en algunos almacenes, etc... Seguramente se ha tocado fondo y el sector debería ir mejorando poco a poco, pero también temo que en la actual coyuntura la mejora de unos pasa por la debilidad de otros".
Para Abad, la especialización pasa por "asesorar y dar servicio al cliente en asuntos como la eficiencia energética". Y cree que lo que más se está dando en la distribución es "ampliación de área geográfica y aumento del portfolio de producto".
Su análisis sobre este año 2014 no es, en cualquier caso, optimista. "La construcción de vivienda nueva seguirá por debajo de la tasa de reposición y la venta del almacén está dirigida a sustituir aquello que se estropea únicamente".
La estrechez de los márgenes en aire acondicionado
Andrés de la Coma, Product Manager de Aire Acondicionado de Pecomark, sí cree que 2014 será mejor que 2013. "Hay muchas obras pendientes que no pueden pararse por más tiempo. En refrigeración, que es a lo que nos dedicamos nosotros básicamente, el mercado va a mejorar. En el último trimestre de 2013 ya lo notamos".
"En aire acondicionado creo que parte de la distribución debe desaparecer porque no hay márgenes. El producto con los precios a los que se vende es una ruina".
Juan José Ayora, gerente del Grupo Avalco, aporta una visión optimista. "Las perspectivas para 2014 son buenas. Pensamos que las actuales previsiones se van a mejorar. España es un país cercano y atractivo para muchas empresas internacionales, y pronto la inversión extranjera va a llegar, generando puestos de trabajo y riqueza, y dinamizando la economía".
Sobre tendencias de mercado, apunta: "Conceptos como la eficiencia energética y la optimización del rendimiento van a ser definitivos. El consumidor demandará productos cada vez más eficientes y de bajo consumo, a la vez que más confortables".
Para Ayora, el sector de la distribución se ha polarizado en dos niveles entre los grandes operadores verticales y los Grupos de Compra, que son los que mejor "aprovecharán la coyuntura actual".
La visión de Eugenio Armbruster, presidente del Grupo Thisa, es, por contra, pesimista. "Tenemos datos más o menos fiables sobre construcción, pero no sobre rehabilitación y reforma. En construcción vemos que en 2013 ha habido 35.000 visados y este año la tendencia a la baja se mantendrá, con una caída en los dos años en torno al 25%. Nuestro sector, calefacción, climatización, fontanería y cuarto de baño, depende en gran medida de la reforma, pero no ha llegado ni de lejos al nivel de los países del norte de Europa y Alemania, donde representa al menos un 80%".
"Creo que la tendencia en la distribución apunta a más cierres porque el sector está en pérdidas. 2014 será un año de caída de la demanda. Al llegar la crisis, las empresas tenían reservas, pero se han ido consumiendo dada la gravedad de la misma. El sector de la distribución sigue estando sobredimensionado, sobran la mitad de los puntos de venta y existe una atomización muy grande. El 90% de la distribución está perdiendo dinero. Subsisten muchas pequeñas empresas familiares que aguantan con un pequeño margen. Sigue habiendo reestructuración pendiente, en definitiva. Por otro lado, habrá fenómenos de concentración con empresas como Cordes & Graefe, que integrará empresas y se expandirá, y Saint-Gobain, que volverá".
"La reforma debería ser uno de los tres pilares en el crecimiento de España, junto con la exportación y el turismo. La reforma de calidad es dinero porque significa ahorro energético, confort y puestos de trabajo. Además, al final, si el arreglo es urgente, no se puede demorar más. Ya son muchos años de crisis y las reformas pendientes en edificios y viviendas en algún momento deben acometerse. Es un sector que ha caído menos. Las empresas que se dedican a reformas lo han hecho un 50%, mientras que en obra nueva hablamos de un 90%, pero no es suficiente, claro está. Luego se observa que el cliente sigue pensando únicamente en el precio, no en la calidad del producto. Se están instalando válvulas que lo mismo no duran ni un año en funcionamiento. Lo deseable sería una reforma de garantías que deba venir de quitarnos el miedo del paro y de la mano del crédito. El sector de la distribución de material eléctrico, en el que nosotros conservamos aún dos puntos de venta en Cataluña, todavía está peor".
Negocio en plena transformación
Para Salvador Escoda, el futuro debe estar presidido por el mercado de la "reforma y la rehabilitación" y habla de una distribución cambiante que "está sufriendo una gran transformación".
Su empresa, pese a la tempestad que vive el sector, sigue abriendo puntos de venta: 4 en 2013 y 4 más en 2014. "Nuestro día a día son las tiendas. El instalador necesita este servicio y nosotros se lo damos. Ofrecemos servicio y asesoramiento en el punto de venta, y eso el profesional lo agradece. Nuestra estrategia es abrir más puntos de venta, llegar cada día más al cliente. Es nuestra apuesta de siempre, pero ahora todavía más que no hay obra nueva".
Emilio J. Díaz, gerente de Termoclub, afirma que el "mercado está aún en permanente cambio. Estos años difíciles están pasando factura a muchas empresas y desgraciadamente pienso que seguirá habiendo cierres. El mercado no genera suficiente rentabilidad para mantener el número de almacenes actuales. Creo que seguirá habiendo profundos cambios en los Grupos, en su composición, estructuras y formas de funcionamiento".
Para Díaz, el mercado en 2014 mantendrá "una senda similar a 2013, quizá con algún pequeño síntoma de mejoría en la última parte del año".
"A medio plazo tendrá lugar un cambio profundo, al igual que está sucediendo en la distribución de otros sectores. Se reducirá el número de actores de mercado, las estructuras serán mucho más profesionales. Los Grupos sufrirán una transformación y sólo aquellos que aporten valores reales tendrán un verdadero reconocimiento. La propia distribución tendrá que asumir un rol distinto conforme a las nuevas reglas del mercado y la sociedad en general: nuevas tecnologías, nuevos procesos de compra, ahorro y eficiencia energética, sostenibilidad, etc", finaliza.
Para José Luis Gutiérrez, gerente de Plameya, el año 2014 debería significar el definitivo punto deinflexión en la situación del sector. "Lo cierto es que yo tengo mucha ilusión porque todo cambie por fin y es algo que también comparto con otros compañeros con los que he hablado. También creo que el usuario final está ya harto de la crisis y, a poco que mejor la economía, la gente ayudará a reactivar el consumo".
Para Gutiérrez, "la reforma y la rehabilitación deben tirar del sector" mucho más que la obra nueva. "En cualquier caso, creo que la mejora se puede hacer más patente en el segundo semestre de 2014".