Calderas y ACS: El mercado frena su caída y se aferra a la tecnología de condensación

Si en este momento la suma de calderas de condensación y bajo NOx es de casi un 80%, el mercado se concentrará de un modo pleno en condensación, como por otro lado ya sucede en otros países de nuestro entorno. Este tipo de producto es menos contaminante y mejora mucho la eficiencia energética de la instalación con lo que disminuye la factura de gas.

Las calderas de condensación conquistarán, pues, el poder a partir de 2015 con la aplicación de la normativa ErP, pero en este momento el mercado también arroja alguna buena noticia, como es el hecho de que se haya estabilizado tras años de fuertes caídas.

Los Planes Renove, desarrollados en varias Comunidades Autónomas, también están sirviendo para animar las ventas y para la sustitución de equipos obsoletos por otros más eficientes.

Además del peso creciente de las calderas de condensación, muchos fabricantes hablan de otro combustible de moda, la biomasa, para explicar la situación más amable que vivimos. Este tipo de calderas, especialmente las de pellets, resulta una opción económica por el ahorro en el consumo que representan.

Son varios los fabricantes que definen este 2014 como un año de estabilización o de leve mejora. Muchos de ellos también creen que será 2015 el momento definitivo para la recuperación. Seguirá, eso sí, pesando con más fuerza la reposición de producto que su implantación en obra nueva.

En calentadores, las marcas hablan de un mercado maduro, inestable y en línea descendente. La tendencia va hacia el desarrollo de producto de bajas emisiones de NOx. Y en el caso de los termos eléctricos, más de lo mismo, viraje hacia la reposición y sustitución de equipos.