Bombas: El mercado se centra cada vez más en productos de mayor eficiencia energética

No debe caer en el olvido que los edificios suponen un 40% de todo el consumo energético de la Unión Europea, por lo que es necesario consumir menos y de un modo más eficiente, lo que equivale a decir que necesitamos instalaciones que gasten menos energía.

Esa situación también tiene una extrapolación aún mayor: la Unión Europea gasta más de 350.000 millones de euros al año para importar energía. En el caso de España, la dependencia energética del exterior se sitúa por encima del 70%. Todo ello hace necesario colocar productos cada vez más eficientes en el mercado.

Y en esa línea se sitúan los fabricantes de bombas. La ErP refuerza un cambio de tendencia y promueve un uso más racional de los recursos. Todo ello también significa más innovación y ahorro de energía, ya que las normativas cada vez serán más exigentes en la calificación de los productos.

El futuro de las bombas, por tanto, tiene que pasar por la revolución tecnológica de los fabricantes, cada vez más comprometidos con la búsqueda de la mejora energética.

Desde el punto de vista tecnológico, una marca apunta a que en muchas instalaciones terciarias se utilizan sistemas de gestión técnica centralizada, lo que conlleva un aumento del confort del usuario y de la fiabilidad del funcionamiento, además de una reducción de costes.

También existe una tendencia hacia sectores que ya triunfan en Europa, pero que en España todavía se encuentran en una fase balbuceante, como es el caso de las instalaciones de District Heating, un mercado de enorme potencial.

Por otro lado, si nos detenemos más en el análisis del mercado, se puede ver que en 2015 se produjeron signos de recuperación evidentes, que deberían proseguir en 2016, si bien en el inicio de año se ha ralentizado algo el crecimiento. Habrá que ir viendo la evolución de un sector que sigue ofreciendo oportunidades de negocio.