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La eficiencia energética no es ningún mantra, es una realidad, lo que está provocando el crecimiento en el mercado de soluciones que apuestan claramente por ella, como es el caso de la aerotermia.
Todas las marcas hablan de la expansión de la aerotermia en los últimos tiempos, en los que su crecimiento se está situando en doble dígito (casi un 40%). La previsión también es optimista para una energía que la organización Greenpeace designó en 2011 como el mejor sistema de calefacción por su eficiencia energética.
Lo cierto es que la aerotermia es un sistema altamente eficiente que garantiza a la vez calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración. Los sistemas de climatización por bomba de calor representan un sistema perfecto en la búsqueda de la descarbonización total que busca la Unión Europea para los edificios en el año 2050 y también para su objetivo más a corto plazo del 20-20-20.
Así ha sido reconocido en el seno de la UE a nivel normativo al considerar esta energía como renovable y también por la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Por todo ello, el segmento de la aerotermia tiene muchas posibilidades de crecimiento, aunque España está aún lejos de las cifras de implantación de otros países europeos, como Francia y Alemania.
Su funcionamiento, basado en transportar calor en vez de generarlo, su flexibilidad de instalación y su rentabilidad, que permite un gran ahorro en el consumo, son factores que están ayudando también a su presencia cada vez mayor en el mercado.
Un fabricante apunta a dos vectores que han sostenido este crecimiento. Por un lado, la evolución tecnológica de los sistemas de generación. Por otro, la entrada en vigor de normativas europeas y nacionales que ponen en valor los conceptos de impacto ambiental y aprovechamiento de energías limpias.
Ciertamente el futuro de la aerotermia ya está aquí. La aerotermia es una alternativa económica y de bajo consumo para las necesidades de todo tipo de viviendas, tanto en obra nueva como en rehabilitación. Y si a eso se le suma el aumento del precio de los combustibles fósiles, su crecimiento está garantizado.