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Las cifras favorables que han acompañado a algunos segmentos de mercado en estos últimos años no han tenido la misma correlación en el caso de las Unidades de Tratamiento de Aire. Si bien el crecimiento del mercado fue de un 2,73% en el año 2016, las últimas cifras disponibles de la patronal AFEC en 2017, que agrupa en las estadísticas UTA´s y Unidades de Ventilación con Recuperación de Calor, no es demasiado favorable: la industria registró un descenso del 0,97%.
Lo cierto es que, pese a este descenso estadístico, la mayoría de fabricantes que nos ha hecho llegar su opinión muestra un ligero optimismo en su visión del mercado y en el devenir de este 2018. De hecho, se destaca que en líneas generales ha mostrado una gran recuperación desde 2015.
Hablamos de un mercado maduro, consolidado, que se nutre de crecimientos más modestos que otros segmentos. Por otro lado, se trata de un producto muy ligado a la construcción y a la industria, lo que determina su evolución.
Una tendencia muy marcada en los últimos años es hacia un número mayor de unidades producidas por fabricantes con certificado Eurovent y una mayor presencia de medidas eficientes, como por ejemplo, mejor transmitancia y puente térmico o ventiladores EC´s. De alguna forma, se puede decir que se está consolidando en este sector la importancia del ahorro energético.
Se trata, además, de un mercado en plena evolución por el avance normativo en eficiencia energética y la búsqueda de reducción en los consumos, y también por el aumento en las exigencias de confort.
Una Unidad de Tratamiento de Aire forma parte de una instalación y debe actuar dentro de un sistema.
Cada climatizadora es única y sus componentes y su sistema de control se fabrican ad hoc. No existen dos instalaciones idénticas, como tampoco hay dos climatizadoras iguales.
Por otro lado, existen muchos aspectos normativos que influyen en este sector, como los Reales Decretos 1027/2007 y 238/2013, la potenciación del Programa de Certificación Eurovent y las Directivas 1025/2009/UE de Ecodiseño y 30/2010/UE de Etiquetado Energético.