La distribución profesional confía en que durante el año 2019 se mantenga el crecimiento del sector

La mejora de las cifras del sector, junto con la buena situación general de la economía, motiva un año más al optimismo a la hora de analizar el mercado de la distribución profesional.

Existen, claro está, serias amenazas si descendemos a la letra pequeña y escuchamos a los protagonistas de la industria, pero el ciclo alcista se mantuvo en 2018 y así seguirá en 2019. Hablamos de un mercado que crece en doble dígito y se apoya en el buen momento de la obra nueva, la rehabilitación y la reforma, además de la reposición de equipos que conllevan las anteriores variables y la obsolescencia de los mismos. La buena situación del consumo también ayuda lo suyo.

Lo cierto es que el invierno fue benigno, lo que no benefició para nada al mercado de calefacción, pero el verano, tras un final de la primavera no especialmente caluroso, se prevé de temperaturas extremas, lo que agradecerá el negocio de la climatización.

Para Esther Estévez, gerente de Amascal, el momento que vive el sector sigue siendo favorable. "El crecimiento en 2018 se estima que fue de un 13%, mientras que para 2019 la perspectiva es similar, se espera un crecimiento en doble dígito, al menos del 10%".

"Lo cierto es que el sector va razonablemente bien, pero no todos los indicadores económicos son buenos, aunque sí lo son los que dependen de la construcción, caso del aumento en el consumo de cemento. La climatología hasta el momento tampoco ha ayudado, ni en el sector de aire acondicionado porque durante el mes de junio no ha hecho apenas calor, ni tampoco en calefacción, porque el invierno ha sido suave. Lo que más tira del mercado es, sin duda, la reposición".

"El sector, en cualquier caso, sigue teniendo una perspectiva favorable para este año y también para 2020. Mi opinión es que el crecimiento será lento, pero quizá más sostenido. Hay que pensar que venimos de una crisis que fue muy compleja. La construcción puede seguir siendo un pilar, pero más seguramente del lado de la reforma y la rehabilitación".

"Uno de los problemas que tienen los distribuidores es el escaso margen, pero es un problema casi estructural. También existe una tendencia que apunta al cambio climático y el reciclado de productos".

En cuanto a inclinaciones del mercado, Estévez apunta a una "mayor convergencia entre los mercados de fontanería y climatización con el de material eléctrico. También la especialización del instalador".

"Creo que en el futuro se ahondará más en la tendencia hacia las tiendas de proximidad que facilitan mucho el trabajo del instalador, el asesoramiento al profesional, el aumento de tipología de productos y el servicio en cualquiera de las fases de la cadena".

"Mi opinión es que el negocio on line ha aumentado más el conocimiento previo del producto que la venta. El instalador sigue siendo un comprador tradicional, que busca acudir a su almacén de confianza".

Más información en: Tecnoinstalación mayo-junio 2019.