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El mercado de emisores de calor no ha sido ajeno a la crisis provocada por el Covid-19, especialmente por el parón sufrido en la construcción durante el confinamiento. Sin embargo, la actual coyuntura ha provocado un fenómeno favorable en la renovación de las viviendas, un lugar en el que se busca el mayor confort, más ahora que llegan los meses fríos.
La necesidad creciente de mayor confort en las viviendas afecta favorablemente por igual a los emisores de calor por agua caliente y eléctricos
Antes de la llegada de la pandemia, las cifras acompañaban a este mercado. Durante el año 2019, según las cifras de la patronal de calefacción Fegeca, se vendieron 956.833 unidades de radiadores de agua caliente, un aumento de un 4,40% con respecto al año anterior. En este mercado se engloban los segmentos de radiadores de cuarto de baño y radiadores de aluminio.
La necesidad creciente de mayor confort en las viviendas afecta favorablemente por igual a los emisores de calor por agua caliente y eléctricos. También a elementos cada vez más estéticos o productos como los toalleros decorativos, cada vez más demandados en el segmento de reformas.
De alguna forma, se puede decir que esta nueva mirada sobre el hogar ha puesto de moda a los radiadores, incluso en obra nueva, especialmente en viviendas unifamiliares.
Se demandan, además, productos con mayor valor añadido, con conectividad wifi o controles inteligentes, también radiadores tubulares que son ideales para el funcionamiento a baja temperatura.
Es el caso de los radiadores eléctricos, destacan por su papel en zonas no muy frías como sistema de calefacción único, segundas residencias, también como apoyo en cualquier zona al sistema de calefacción principal, como uso principal cuando no se necesita conectar el sistema principal de calefacción, etc. Además, es un producto que destaca por su fácil instalación y sencillez de uso.
Una marca apunta a que sigue siendo un mercado maduro principalmente de reposición. Sin embargo, la realidad del sector inmobiliario en España, las regulaciones de comercialización de este tipo de productos y el gran parque de viviendas con uso exclusivo de electricidad hacen que todavía se prevea un crecimiento del volumen de mercado en los próximos años.
