"La sociedad se ha concienciado ahora, como consecuencia del Covid-19, de la importancia del aire que respiramos 24 horas al día"

Ingeniero Técnico de Telecomunicaciones (URL), además de contar con estudios de Dirección de Marketing (EADA), Pau Pallàs ha desarrollado su trayectoria profesional durante más de 30 años entre el sector industrial y el terciario, colaborando en multinacionales de Instrumentación y Sistemas de Control. Actualmente, Pallàs es Director de Engitecsa, gabinete de Ingeniería de instalaciones, fundador de Aire Interior, consultoría integradora especializada en la calidad de aire interior, además de Presidente del Clúster IAQ.

En esta entrevista, Pallàs explica los orígenes del Clúster IAQ y sus objetivos principales en un tiempo como el que vivimos, en el que la calidad del aire interior ha cobrado una importancia enorme. "Hemos agrupado nuestros objetivos fundacionales en la creación de un Centro de Excelencia IAQ, que se articula en varias líneas: la difusión de la IAQ a través de artículos técnicos, mesas redondas y jornadas técnicas que se han ido desarrollando, la formación en IAQ, y paralelamente estamos diseñando entre todos como aportar a la sociedad de la forma más efectiva soluciones reales para la mejora de la IAQ, a través de un proyecto que está en fase de desarrollo", afirma.

¿Cuál fue la génesis del Clúster IAQ?
Sin duda el inicio de la crisis sanitaria desatada a raíz del coronavirus, y la constatación de su propagación a través de aerosoles, ha sido uno de los detonantes que impulsó a un grupo de profesionales de empresas del sector del tratamiento de aire a poner en valor la importancia de la calidad del aire interior como vector complementario al confort y al ahorro energético.

¿Por qué motivo se puso en marcha?
El Clúster IAQ inició su recorrido tras la reflexión tanto del desconocimiento generalizado por parte de la sociedad de la importancia de la calidad del aire interior (IAQ) como de la inactividad para su mejora, teniendo en cuenta que pasamos la mayoría de nuestras vidas en el interior de edificios o infraestructuras.

¿Cuáles son los objetivos principales del Clúster IAQ?
Aportar soluciones para la mejora de la IAQ, divulgación social de la importancia de la calidad del aire interior y crear un sello de garantía de calidad de la IAQ.

¿Qué análisis puede hacer del tiempo que lleva en marcha el Clúster IAQ?
El análisis es muy positivo. Estamos orgullosos y plenamente convencidos de la necesidad de haber creado el Clúster IAQ, que fundamos 11 empresas y una entidad científico-técnica, y en estos momentos después de un año de actividad, está formado por 24 empresas y dos entidades científico-técnicas, así como más de 15 convenios de colaboración con entidades vinculadas a la calidad del aire interior y Administraciones Públicas.

¿Qué objetivos ha cubierto hasta este momento?
Hemos agrupado nuestros objetivos fundacionales en la creación de un “Centro de Excelencia IAQ”, que se articula en varias líneas: la difusión de la IAQ a través de artículos técnicos, mesas redondas y jornadas técnicas que se han ido desarrollando, la formación en IAQ, y paralelamente estamos diseñando entre todos como aportar a la sociedad de la forma más efectiva soluciones reales para la mejora de la IAQ, a través de un proyecto que está en fase de desarrollo.

¿Qué trabajo están desarrollando a nivel formativo desde el Clúster IAQ?
A nivel formativo, el Clúster IAQ junto a una entidad de reconocido prestigio ha creado un Postgrado de IAQ, que se impartirá a partir del cuarto trimestre del 2021, con un programa que abarca toda la transversalidad de la calidad del aire interior. En el Postgrado, se tratarán desde las causas que pueden generar una inadecuada calidad de aire interior, pasando por las herramientas y medios para solucionarlo, hasta los efectos que puede producir en la salud de las personas.

Vivimos un tiempo complejo, lleno de incertidumbres. Imaginamos que el papel del Clúster IAQ en este momento será muy relevante, ¿no?
Por supuesto, a medida que se ha ido consolidando la importancia de la transmisión del patógeno a través de aerosoles, la sociedad se ha ido concienciando de la importancia del aire que respiramos veinticuatro horas al día, sin descanso. Esta reflexión ha hecho extrapolar que la IAQ nos afecta a todos, y en todos aquellos espacios interiores donde habitamos, trabajamos o nos desplazamos.

La pandemia del Covid-19 ha demostrado la importancia de la calidad del aire interior. ¿Hasta qué punto es importante en su opinión?
Efectivamente, la pandemia del Covid-19 ha sido el detonante que ha permitido poner en valor la gran importancia de la IAQ, sin embargo, el Clúster IAQ es atemporal, ya que existen multitud de compuestos tóxicos a los que estamos expuestos y afectan a la salud de las personas indistintamente de la pandemia actual.

Imaginamos que en calidad del aire está casi todo por hacer en nuestro sector o, al menos, existe un enorme campo por desarrollar. ¿Cuál es su análisis?
Decir que está todo por hacer sería inapropiado, existen una serie de normativas (RITE, CTE) y otras a nivel internacional, que desde hace años clasifican la calidad del aire por tipo de actividad e indican los medios que se deben aplicar en las instalaciones para que se cumplan. Sin embargo, no solo hay que pensar en la ventilación y en la filtración, también hay que analizar las emisiones de volátiles que emiten los materiales con los que convivimos en los edificios.
En general, podríamos decir que hay un gran recorrido de mejora de la IAQ, combinada con el ahorro energético, la sostenibilidad y el confort de las personas. Este recorrido se centra en la mejora de normativas, pero sobre todo en la exigencia de su revisión, adaptación y cumplimiento.

¿Cree que los profesionales del sector están suficientemente concienciados de la importancia de la calidad del aire interior?
Este es un elemento clave, no solo a nivel del sector, también a nivel de la sociedad en general. Una de las funciones básicas del Clúster IAQ es la difusión de la importancia de una IAQ adecuada, que complementamos con un Postgrado, así como con unidades formativas que se implementarán a través de nuestro portal web.
La experiencia nos indica que los cambios, sean cuales sean, requieren su tiempo, tanto a nivel profesional como por parte de la sociedad, sin olvidar el campo normativo, que dinamiza los requerimientos que se deben cumplir.

¿Qué planes tienen desde el Clúster IAQ para seguir creciendo tanto en número de socios como en relevancia en el mercado?
El análisis de la calidad del aire interior es muy transversal, requiriéndose de distintas disciplinas para un tratamiento adecuado. Voy a exponerlo en un ejemplo: al entrar en un edificio de pública concurrencia, rápidamente nos daremos cuenta de si tenemos confort térmico, sin embargo, no podremos saber con facilidad cual es la calidad del aire que estamos respirando.
Desde el Clúster IAQ hemos creado tres Grandes Áreas o Cadenas de Valor, la del tratamiento del aire, la cadena de materiales y la de salud.
Para cada una de estas tres cadenas de valor, estamos creciendo tanto con socios a nivel empresarial con socios a nivel científico-técnico, ya que entendemos que es imprescindible facilitar las sinergias entre las empresas y los centros de investigación de las cadenas de valor vinculadas a la IAQ
Por otro lado, entendemos que la relevancia la iremos consolidando a medida que desarrollemos proyectos útiles para la sociedad y para las personas.

¿Qué interlocución tienen desde el Clúster IAQ con las diferentes Administraciones a todos los niveles? Imaginamos que todas ellas serán hoy conscientes de la importancia de la calidad del aire interior.
Los inicios de cualquier iniciativa son siempre difíciles, si a ello le añadimos que nuestra trayectoria hasta la fecha se ha desarrollado íntegramente sumergida en la actual crisis sanitaria, podríamos concluir que no ha sido fácil. Sin embargo, hemos tenido y tenemos la suerte de estar formados por un equipo de profesionales altamente implicados, conscientes de los retos del proyecto.
Dicho esto, la interlocución con las Administraciones ha sido creciente, en gran parte gracias al soporte de Pimec, que nos ha acompañado desde los inicios de nuestra constitución. Todas las instituciones son conscientes de la importancia de la IAQ. Otro tema es la manera de abordar las mejoras necesarias para reducir los impactos que pueden tener en la sociedad, ya que la IAQ no tiene reglas standard para su mejora, hay que analizarla de forma individualizada, y las soluciones de mejora a menudo no son sencillas.

Y a nivel normativo, ¿qué normas existen hoy en día para garantizar la calidad del aire interior y cuáles serían necesarias para desarrollar a futuro este sector?
Lo hemos comentado anteriormente, la normativa actual está compuesta por RITE y CTE. Se respaldan en las Normas UNE, concretamente la UNE 171330-1, UNE 1713302 y UNE 100012 que aportan criterios de valoración para una correcta IAQ y actuaciones en instalaciones existentes para su mejora.
Aunque el RITE, a nivel terciario, establece la obligatoriedad de disponer de certificados favorables anuales de IAQ en edificios con potencia térmica superior a 70KW, el seguimiento que se hace por parte de las autoridades de su cumplimiento es ínfimo.
Sería necesario extrapolar esta obligatoriedad a cualquier uso y potencia de instalación, así como instaurar un sistema de seguimiento y control del cumplimiento efectivo.