El sector de la construcción europeo continuará creciendo, pero con más dudas y a menor velocidad

Lo que se pudo constatar en el Euroconstruct sobre el sector europeo de la construcción es la profunda diferencia entre mercados. En un momento como el actual en el que la economía todavía no está absolutamente a salvo, algunos países europeos están construyendo como no lo habían hecho en los últimos 20 años y están logrando cifras récord de producción. Muy probablemente, cuando pensamos en territorios con su sector de la construcción en buena forma nos imaginamos un par de regiones escandinavas y tendemos a calificar el fenómeno de anecdótico. Pero las cifras Euroconstruct nos demuestran que hay hasta 9 países donde se esperan producciones récord, o rozando el récord, entre los cuales encontramos pesos pesantes como el Reino Unido u Holanda. Este grupo de países de éxito equivale al 40% del mercado europeo, por lo cual podemos concluir que una parte muy sustancial de Europa está claramente en la mejor parte del ciclo.

Pero incluso en estos territorios donde el sector de la construcción ha esquivado la crisis, los crecimientos son bajos. No es muy diferente al panorama de bajo crecimiento económico que, según Sergi Martrat, Director de Macroeconomía y Mercados Financieros del Banco de Sabadell, se está convirtiendo en estructural a nivel mundial. Los expertos del Banco Sabadell fueron invitados a describir el contexto macroeconómico que condicionará a la industria de la construcción, y su intervención nos mostró como las amenazas no son todas de naturaleza meramente económica. Así pues, no sólo tenemos que vigilar la debilidad de la inversión o de la productividad, sino que también tenemos que estar pendientes de la desigualdad social o de la despoblación del centro político.

En la conferencia también participó un representante de la Comisión Europea, que nos puso al día de la estrategia comunitaria respecto a la contratación pública. Antonio Paparella,Coordinador del Equipo de Construcción Sostenible, puso cifras al papel del sector público en la economía de la UE, pero al mismo tiempo fue muy sincero a la hora de admitir que las administraciones públicas no siempre sacan todo el provecho de la inversión, o que las licitaciones raramente se otorgan a otras empresas que no sean grandes empresas del país donde se saca el contrato a concurso. Identificados los problemas, las nuevas formas de contratación bascularán hacia el entorno digital, que tendría que favorecer el trabajo colaborativo, la participación de pymes y en última instancia, un mejor aprovechamiento de los recursos.

También hubo la ocasión de mirar más allá de las fronteras europeas para comprobar el estado de salud del sector construcción a escala mundial. Antonio Mura de Cresme puso el mercado europeo en el contexto global y descubrimos como el viejo continente se ha quedado con una cuota de producción sólo del 18%. La actividad constructora ha sufrido un contundente fenómeno “centrífugo” desde las economías desarrolladas hacia las emergentes: en 2000 dos tercios de la producción provenía de los países desarrollados, en 2015 se había reducido a un tercio. El mensaje es que el traspaso podría haberse estabilizado y podría haber llegado a un cierto techo. Por lo tanto, continuará habiendo diferencias entre el potencial de crecimiento de Europa y del resto del mundo, pero quizás ya no serán tan intensamente contrastadas como las de la época que dejamos atrás.

La próxima Conferencia Euroconstruct se celebrará los próximos días 8 y 9 de junio en Ámsterdam, organizada por el EIB, el miembro holandés del grupo.