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En España existen más de 13 millones de usuarios de instalaciones domésticas de gas, 2,2 millones sólo en la Comunidad de Madrid, cuyo uso representa más del 50% del consumo de energía de las familias.
Con motivo de la temporada de invierno, la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia) ha puesto en marcha, en colaboración con la Comunidad de Madrid y otras empresas (Nedgia Madrid, Repsol y Madrileña Red de Gas) y organismos del sector (Sedigas), una campaña de seguridad para prevenir accidentes de gas en viviendas.
Cada año se realiza la inspección obligatoria -cada 5 años- de aproximadamente 400.000 instalaciones, el 25% del parque (1.600.0000), por lo que recordar las medidas de seguridad tanto de calderas y calentadores, como de las propias instalaciones, es fundamental para garantizar el correcto funcionamiento de los equipos, consideran en Agremia.
Entre los consejos destinados al usuario que recuerda esta campaña de concienciación destacan los siguientes:
10. En las instalaciones de butano/propano, vigile el buen estado del regulador y del tubo flexible, así como su caducidad.
“Los incidentes en las instalaciones de gas no son frecuentes, y con un correcto mantenimiento de las instalaciones y aparatos de gas son inexistentes. No obstante, debemos poner los medios necesarios para evitar cualquier riesgo. Cumplir la normativa realizando los mantenimientos obligatorios eliminará la posibilidad de que se produzcan accidentes, como por ejemplo una deficiente ventilación del local o un mal funcionamiento del aparato”, manifiestan desde Agremia.
Según datos facilitados por las compañías, más del 85% de las inspecciones resultaron favorables en 2020. “Nedgia atendió un total de 821 avisos debido a defectos de aparatos, por lo que es importante realizar la inspección periódica obligatoria cada cinco años, tal y como establece la normativa vigente, así como el mantenimiento cada dos años de las calderas”, apuntan desde Agremia. “Por su parte, en un 17% de las 120.000 inspecciones periódicas realizadas por Madrileña Red de Gas se detectaron anomalías principales o secundarias”, concluyen.