Empresas Premium
Empresas Premium
Estas estructuras consiguen que la temperatura interior se mantenga estable.
Las estructuras conocidas como cerramientos de aluminio son elementos muy populares en la arquitectura urbana de los edificios para viviendas, pero también en el entorno de los locales comerciales y en el industrial. Considerados en el mundo de la construcción y del diseño como elementos ideales para ser instalados en espacios de exterior, ya sean terrazas, balcones, fachadas e incluso en patios y jardines.
Como cabe suponer al verlos colocados, estos elementos estructurales tienen como misión principal proporcionar aislamiento y protección, tanto acústico como térmico a espacios expuestos a las condiciones medioambientales y climáticas por estar ubicados en exteriores. Funcionan como eficaces barreras de contención ante la lluvia, el granizo, la nieve, el viento, el exceso de luz solar, y consiguen que la temperatura en interiores se mantenga estable.
Los beneficios que ofrecen estos complementos arquitectónicos se optimizan según el tipo de cerramiento que se elija. En este sentido, para acertar con el más indicado, lo más aconsejable es dejarse asesorar por especialistas que sabrán diseñar el más adecuado, además de incorporar los elementos de aluminio de más calidad, como los que ofrece la marca de puertas y ventanas Baau del fabricante Macrisal, establecido como el máximo referente en este mercado y con la mejor relación calidad precio.
De forma general, las distintas opciones posibles ofrecen eficiencia energética, durabilidad y resistencia gracias al aluminio utilizado, una gran versatilidad en cuanto a los diseños posibles, una clara mejora en la estética global del edificio, así como formar parte de los elementos constructivos más eficientes, tanto energéticamente como por su sostenibilidad. Motivos estos que ofrecen datos suficientes para entender la importancia que tienen hoy día los cerramientos de aluminio en la construcción.
En concreto, su uso se divide fundamentalmente en las siguientes ubicaciones:
Para terrazas y balcones. Los cerramientos especialmente destinados a crear interiores en las terrazas y en los balcones de los pisos son los más demandados. Se trata de soluciones muy prácticas y versátiles, ideales para ganar espacio en el salón o en alguna habitación, optimizando los espacios exteriores que pasan a ser habitables durante todo el año.
Son instalaciones especialmente útiles y aconsejables en zonas frías o de climas variables en los que la terraza o el balcón pasa la mayor parte del año en desuso. Además de ampliar la zona de uso habitual, permite usarse este espacio en los días de lluvia, frío o calor, es decir, se amplía considerablemente el espacio útil y habitable.
Además, como suelen instalarse de forma que se deslicen o se plieguen y abran completamente, proporciona la opción de volver a abrirse en buena medida, dejando entrar la luz y el aire que se desee para esos días primaverales en los que apetezca el contacto con el exterior. En definitiva, se consigue equilibrar la vida cómoda y confortable de interior con espacios al aire libre.
Para porches. En este caso, los cerramientos de porches de aluminio declaran su importancia para la construcción porque permiten crear zonas exclusivas, adicionales, en espacios como jardines y patios, es decir, al aire libre. Estas instalaciones ofrecen un espacio protegido que se introduce en un lugar abierto y, generalmente, natural. Con los cerramientos para porches, las personas estarán protegidas del ataque de insectos, de las inclemencias del tiempo e incluso de los días de más calor de los veranos, sin descartar la opción de sentirse en campo abierto.
Suelen ser estructuras amplias, por lo que permiten ser decorados o habilitados de forma particular y personalizada. Los aficionados a la decoración y los diseñadores de interiores encuentran aquí una oportunidad excepcional para desarrollar su creatividad, decorando y amueblando con estilos que mezclan exterior e interior con completa libertad, dando lugar a rincones muy funcionales y atractivos.
Para los patios y jardines. Estos cerramientos son incluso más versátiles que los utilizados para los porches, aunque, en principio, pudieran tener el mismo propósito; ocupar zonas ajardinadas o patios ubicados al aire libre. Gracias a sus perfiles de aluminio, se crean estructuras sólidas por sí mismas, resistentes y duraderas, sin el apoyo estructural de una edificación. Con estos espacios se disfrutará todo el año del patio, ajustando a placer la entrada de aire o luz natural según las condiciones que se deseen tener. Su adaptabilidad es total, pudiendo ser comedores, lugares de reunión, para lectura y descanso… Con la capacidad añadida de fusionarse con cualquier estilo arquitectónico que ya posea el lugar.
Para las fachadas. En la actualidad, estos cerramientos enfocados en su uso para fachadas se han posicionado como unos elementos de gran importancia para la arquitectura contemporánea. Son elementos altamente estéticos, ofreciendo la oportunidad de resaltar la belleza del edificio, sin dar de lado su función protectora en cuanto al sonido y a los efectos de las condiciones climáticas.
La enorme variedad de diseños posibles, de estilos y acabados, resultan un tesoro para llenar de detalles una edificación y proporcionar el carácter y personalidad que a la mayoría de construcciones le falta. Por otro lado, también se utilizan para mejorar la eficiencia energética y mantener el control sobre la entrada de calor o frescor, de luz o de sombra del exterior, resultando un aporte notable en cuanto a la reducción del gasto energético, así como su consideración de elemento colaborador de la sostenibilidad.